El dato del último mes podría suponer el arranque de una trayectoria de descensos
Por fin el petróleo da un respiro a la inflación. Los precios bajaron dos décimas el pasado agosto, y la tasa de aumento anual se moderó en cuatro décimas hasta situarse en el 4,9%, gracias al descenso de los carburantes y combustibles y, en menor medida, por la recta final de las rebajas veraniegas.Después de tres meses de continuados repuntes, el dato del pasado mes podría suponer el arranque en una trayectoria de descensos. Si el crudo lo permite y siempre que no tengamos otras sorpresas negativas, se apresuró a puntualizar el vicepresidente económico Pedro Solbes, la inflación acabará el año «algo por debajo del 4%».El diferencial con la zona euro vuelve a situarse en 1,1 puntos, la tasa promedio desde nuestro ingreso en la Unión Monetaria, tras haber trepado a 1,3 puntos en julio. Lo malo es que esa nueva distancia -que perjudica seriamente la competitividad de nuestras exportaciones- ya no se está viendo acompañada de un mayor ritmo de crecimiento económico. La recesión acecha y España se encuentra ahora embarcada en la misma nave que el resto de los principales países socios de la moneda común.En agosto, según confirmó el Instituto Nacional de Estadística, la caída del IPC en dos décimas fue la consecuencia de un descenso del 2,3% en el capítulo del transporte. El recorte en los precios internacionales de la energía se trasladó, al menos en parte, a carburantes y lubricantes, que se abarataron el 5,9%, y también a otros combustibles. La rebaja de estos últimos en un 8,4% repercutió en la caída de precios de la vivienda, que computan los costes de una serie de servicios básicos, el gas entre ellos. Y el pasado mes todavía se dejaron sentir los efectos de las rebajas. Las prendas de vestir aún mostraron una caída mensual del 0,6% en sus precios.Viajes y hotelesPor el contrario, en agosto se encarecieron el 7,7% los viajes organizados y el 9,7% los precios de hoteles y otros alojamientos.Medicina, menaje del hogar, enseñanza y bebidas alcohólicas y tabaco no registraron variación mensual.Pero todavía en el último año se han encarecido el 20% los carburantes y combustibles, el 4,2% los alimentos frescos y el 7,6% los alimentos elaborados, bebidas y tabaco. La leche está un 19,1% más cara que doce meses antes, el precio de los huevos ha subido el 15,6%, y el pan cuesta un 10,8% más. También es notable el repunte del 12,3% en el transporte público interurbano. Las comunicaciones, con un descenso del 0,1%; los medicamentos, con recorte del 2,4%; y los electrodomésticos y sus reparaciones, con tarifas que han bajado el 1,1%, son los únicos bienes y servicios que muestran menores precios que un año antes.Por autonomías, los precios bajaron en Navarra nada menos que siete décimas en agosto. El descenso fue de cuatro décimas en Baleares, Cantabria y Castilla- La Mancha y de tres décimas en Castilla y León y Galicia. Retrocesos de dos décimas, iguales a la media nacional, se registraron en Andalucía, Aragón, Asturias, Canarias, Cataluña, la Comunidad Valenciana, Extremadura, Murcia, La Rioja y Melilla. La rebaja se limitó a una décima en Madrid y el País Vasco y los precios se mantuvieron sin cambios en Ceuta.La tasa más alta de inflación interanual se registró en Aragón, con el 5,6%. Por encima del 5% se situaron Canarias, Castilla- La Mancha, Galicia, Cantabria, Castilla y León y Extremadura.
Por fin el petróleo da un respiro a la inflación. Los precios bajaron dos décimas el pasado agosto, y la tasa de aumento anual se moderó en cuatro décimas hasta situarse en el 4,9%, gracias al descenso de los carburantes y combustibles y, en menor medida, por la recta final de las rebajas veraniegas.Después de tres meses de continuados repuntes, el dato del pasado mes podría suponer el arranque en una trayectoria de descensos. Si el crudo lo permite y siempre que no tengamos otras sorpresas negativas, se apresuró a puntualizar el vicepresidente económico Pedro Solbes, la inflación acabará el año «algo por debajo del 4%».El diferencial con la zona euro vuelve a situarse en 1,1 puntos, la tasa promedio desde nuestro ingreso en la Unión Monetaria, tras haber trepado a 1,3 puntos en julio. Lo malo es que esa nueva distancia -que perjudica seriamente la competitividad de nuestras exportaciones- ya no se está viendo acompañada de un mayor ritmo de crecimiento económico. La recesión acecha y España se encuentra ahora embarcada en la misma nave que el resto de los principales países socios de la moneda común.En agosto, según confirmó el Instituto Nacional de Estadística, la caída del IPC en dos décimas fue la consecuencia de un descenso del 2,3% en el capítulo del transporte. El recorte en los precios internacionales de la energía se trasladó, al menos en parte, a carburantes y lubricantes, que se abarataron el 5,9%, y también a otros combustibles. La rebaja de estos últimos en un 8,4% repercutió en la caída de precios de la vivienda, que computan los costes de una serie de servicios básicos, el gas entre ellos. Y el pasado mes todavía se dejaron sentir los efectos de las rebajas. Las prendas de vestir aún mostraron una caída mensual del 0,6% en sus precios.Viajes y hotelesPor el contrario, en agosto se encarecieron el 7,7% los viajes organizados y el 9,7% los precios de hoteles y otros alojamientos.Medicina, menaje del hogar, enseñanza y bebidas alcohólicas y tabaco no registraron variación mensual.Pero todavía en el último año se han encarecido el 20% los carburantes y combustibles, el 4,2% los alimentos frescos y el 7,6% los alimentos elaborados, bebidas y tabaco. La leche está un 19,1% más cara que doce meses antes, el precio de los huevos ha subido el 15,6%, y el pan cuesta un 10,8% más. También es notable el repunte del 12,3% en el transporte público interurbano. Las comunicaciones, con un descenso del 0,1%; los medicamentos, con recorte del 2,4%; y los electrodomésticos y sus reparaciones, con tarifas que han bajado el 1,1%, son los únicos bienes y servicios que muestran menores precios que un año antes.Por autonomías, los precios bajaron en Navarra nada menos que siete décimas en agosto. El descenso fue de cuatro décimas en Baleares, Cantabria y Castilla- La Mancha y de tres décimas en Castilla y León y Galicia. Retrocesos de dos décimas, iguales a la media nacional, se registraron en Andalucía, Aragón, Asturias, Canarias, Cataluña, la Comunidad Valenciana, Extremadura, Murcia, La Rioja y Melilla. La rebaja se limitó a una décima en Madrid y el País Vasco y los precios se mantuvieron sin cambios en Ceuta.La tasa más alta de inflación interanual se registró en Aragón, con el 5,6%. Por encima del 5% se situaron Canarias, Castilla- La Mancha, Galicia, Cantabria, Castilla y León y Extremadura.
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