Le golpearon varias veces con una silla para arrebatarle una bandeja que encontraron en el contenedor en el que hurgaban en busca de alimentos. El agredido, vecino de la barriada de Tiro de Pichón, fue trasladado en ambulancia a urgencias del Hospital Clínico por las heridas que presentaba
Varias manos que hurgan en un contenedor de basura encuentran a la vez una bandeja de pescado con buena pinta. Ninguno quiere renunciar a la pieza. El almuerzo les va en ello. Aparece el instinto de supervivencia. Luego la desesperación. Las dos mujeres reducen a golpes con una silla a su rival. El botín es suyo.
La escena se representó ayer en Málaga capital. Es la crisis en estado puro, la otra cara de la sociedad del bienestar y de la opulencia. Personas que buscan su sustento en el lugar donde otros arrojan sus despojos. Lo que no vale para unos, es vital para otros.
Los tres implicados coincidieron en un contenedor de basura de la calle Marea Baja -paralela a la avenida María Zambrano- en el que los trabajadores de un supermercado tiran los productos que retiran de las estanterías por estar pasados de fecha. Se trata de artículos que han cumplido la fecha de consumo preferente pero que no necesariamente están caducados.
Disputa
Las dos mujeres, ambas de origen magrebí, iban juntas. Se disputaban los desperdicios del contenedor con un hombre español, de mediana edad, que tiene su domicilio en la barriada de Tiro de Pichón, que al parecer vive de la caridad, según fuentes del caso.
Las mujeres y el hombre hallaron una pieza de pescado con buen aspecto y empezaron a discutir sobre quién la había encontrado primero. Ninguno quería renunciar al botín y la disputa se tornó violenta.
Según las fuentes, las mujeres cogieron una silla que estaba tirada junto al contenedor y empezaron a pegarle al hombre, que recibió varios golpes en la cadera y en la espalda. Tras reducirlo, lo dejaron malherido en el suelo y se marcharon del lugar, con el trozo de pescado.
Ambulancia
Un testigo de la agresión telefoneó rápidamente a la sala del 092 de la Policía Local de Málaga, que envió una patrulla a la zona. Al llegar, los agentes encontraron al hombre tendido en el suelo. Se quejaba de fuertes dolores en la cadera, ya que, según explicó a los policías, se había sometido a una intervención quirúrgica recientemente.
Los agentes avisaron al servicio de emergencias sanitarias 061, que envió una ambulancia. La víctima fue trasladada a urgencias del Hospital Clínico Universitario, donde la atendieron de las contusiones que presentaba.
Varias manos que hurgan en un contenedor de basura encuentran a la vez una bandeja de pescado con buena pinta. Ninguno quiere renunciar a la pieza. El almuerzo les va en ello. Aparece el instinto de supervivencia. Luego la desesperación. Las dos mujeres reducen a golpes con una silla a su rival. El botín es suyo.
La escena se representó ayer en Málaga capital. Es la crisis en estado puro, la otra cara de la sociedad del bienestar y de la opulencia. Personas que buscan su sustento en el lugar donde otros arrojan sus despojos. Lo que no vale para unos, es vital para otros.
Los tres implicados coincidieron en un contenedor de basura de la calle Marea Baja -paralela a la avenida María Zambrano- en el que los trabajadores de un supermercado tiran los productos que retiran de las estanterías por estar pasados de fecha. Se trata de artículos que han cumplido la fecha de consumo preferente pero que no necesariamente están caducados.
Disputa
Las dos mujeres, ambas de origen magrebí, iban juntas. Se disputaban los desperdicios del contenedor con un hombre español, de mediana edad, que tiene su domicilio en la barriada de Tiro de Pichón, que al parecer vive de la caridad, según fuentes del caso.
Las mujeres y el hombre hallaron una pieza de pescado con buen aspecto y empezaron a discutir sobre quién la había encontrado primero. Ninguno quería renunciar al botín y la disputa se tornó violenta.
Según las fuentes, las mujeres cogieron una silla que estaba tirada junto al contenedor y empezaron a pegarle al hombre, que recibió varios golpes en la cadera y en la espalda. Tras reducirlo, lo dejaron malherido en el suelo y se marcharon del lugar, con el trozo de pescado.
Ambulancia
Un testigo de la agresión telefoneó rápidamente a la sala del 092 de la Policía Local de Málaga, que envió una patrulla a la zona. Al llegar, los agentes encontraron al hombre tendido en el suelo. Se quejaba de fuertes dolores en la cadera, ya que, según explicó a los policías, se había sometido a una intervención quirúrgica recientemente.
Los agentes avisaron al servicio de emergencias sanitarias 061, que envió una ambulancia. La víctima fue trasladada a urgencias del Hospital Clínico Universitario, donde la atendieron de las contusiones que presentaba.
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